jueves, 27 de noviembre de 2008

Eduardo Celdran Oteo (Ruta de los Monasterios 2008)












RUTA DE LOS MONASTERIOS (La Rioja)

Mayo 2008
Trece coches nos reunimos en unos de los rincones preferidos del Club para comer, el restaurante Balcon de Brezal de El Quintanarejo, un pueblo que no aparece en los mapas y que se encuentra a pie de la laguna negra de Urbion.

La cita era a las 12h para cargar GPS, repartir rutometros, breafing y saludos previos. Para pasar a continuación directamente a la comida. Tras la comida, una breve excursión a la Laguna Negra, para su visita, A continuación comenzamos la ruta en si, ascendiendo al puerto de Santa Inés que nos introducía directamente en La Rioja. Junto en la pequeña estación de Ski, tomábamos una pista que atravesaba un monte de pinos de gran belleza y que descendía suavemente hasta Montenegro de Cameros. Una vez allí por carretera ascendimos el puerto del mismo nombre, desde donde la perspectiva de La Sierra de Urbion y La Demanda, son espectaculares. Ahora tocaba descender hasta el valle del río Najerilla, con la parada obligada de Venta Goyo para repostar. El acceso al monasterio de Valvanera lo hicimos a través de una pista que discurre por el fondo del valle y que de repente asciende al aparcamiento. Ya en el monasterio nos instalamos y procedimos a la cena y posteriores comentarios en el salón principal.



Segunda etapa



A las 10h, tras el desayuno, procedimos a hincar la segunda etapa que luego nos depararía alguna sorpresa. Ascendimos el valle del Najerilla para a continuación pasar a la provincia de Burgos a través de Neila. Una vez comprado el pan, visitamos las lagunas de Neila, con una caminata entre la nieve, pero bajo un sol espléndido. De nuevo en los vehículos descendimos entre bosques de pinos hasta Huerta de Abajo y Monterrubio de la Demanda. Ya pie de la Demanda iniciamos la ascensión hasta la Ermita de la Soledad, lugar elegido para la comida. Nada mas comer una trialera en forma de subida de Cortafuegos, puso salsa a la ascensión. Pero la sorpresa vendría al coronar la Cruz de la Demanda, donde la nieve aun permanecía en forma de neveros tapando completamente la pista y haciendo imposible el paso. Tras estudiar la situación decidimos cambiar el itinerario y volver por la cuerda de la sierra en dirección Valdezcaray. Pero tras unos kilómetros de avance, otro nevero nos cortaba el paso antes de llegar al Pico san Lorenzo. Esto solo nos dejaba la opción de deshacer todo el camino andado, pero gracias al nuevo mapa “topo” de Garmin, encontramos una pista que descendía por la cara sur hasta Monterrubio, por un lugar distinto al que habíamos utilizado para subir. Hincamos el descenso e improvisamos una nueva ruta de vuelta a la zona del Monasterio, que resulto bastante divertida, entre barrizales y pistas de piedra. Un ultimo intento por cumplir la etapa nos llevo a ascender en sentido contrario la ultima pista de la etapa, pero al llegar a 800Mts del Pico san Lorenzo, de nuevo la nieve impedía el paso, el nevero helado tenia la misma pendiente que la montaña y con la umbría tenia poca pinta de derretirse.

Dimos la vuelta y descendimos hasta el embalse de Mansilla, el cual bordeamos por una bella pista, que nos llevaba de nuevo a Venta Goyo para repostar. Ya en el Monasterio y tras la cena pudimos celebrar el cumpleaños de Juan, con varios brindis de Cava.


Tercera etapa



Este día tocaba hacer la visita al monasterio de Yuso, cuna del Castellano. Así iniciamos la etapa en dirección a Anguiano, para tomas a continuación la pista que nos llevaba al vadeo de un arroyo, bastante espectacular, ya que el camino seguía su cauce entre ramas durante 100Mts. A continuación los pueblos de Matute y Tobía, nos internaban en un ascenso por pista hasta Villaverde de rioja, desde donde se podían observar los “altos de matute” unas formaciones rocosas con colonias de Buitres revoloteando a su alrededor.

Antes de llegar al monasterio, otra pista nos llevaba a visitar unos prados desde donde se podía ver el monasterio desde lo alto.

La visita, como siempre muy interesante no llevo hasta la hora de comer. Nos pusimos en ruta en busca de una zona recreativa donde comimos junto a un caudaloso río y bajo la sobra de una carpa plegable que Juan aporto al grupo.

Ya por la tarde nuestra pista ascendía de nuevo a lo alto de la sierra de la Demanda, con la incertidumbre de no saber si nos encontraríamos de nuevo la pista cortada por la nieve. Al llegar a lo alto, encontramos unos senderistas perdido, que lógicamente socorrimos. La pista de nuevo estaba interrumpida por la nieve, Marcos y Juan investigaron el paso, que finalmente, con una rueda en por la nieve y la otra por el borde del camino, junto al precipicio, se pudo superar. Una vez en el otro lado, la pista que descendía hasta Valdezcaray estaba completamente despejada. Nuestra próxima visita seria el pueblo de Ezcaray. Tras un paseo iniciamos de nuevo la marcha con una sugerencia de “atajo” por parte de Eduardo, para legar a San Millán de la Cogolla. Se trataba de una pista que terminaba en un vertiginoso cortafuego en bajada hasta el pie mismo del monasterio. Un enlace por carretera nos devolvió a nuestro retiro, donde nos ganamos una buena “broca” por parte de la encargada de la hospedería, al llegar una hora tarde a la cena.



Cuarta etapa



Esta ruta era solo de mediodía, e iniciábamos la jornada con un vadeo del río Najerilla, que casi nunca habíamos podido hacer en otras ediciones, por la crecida del río. El vadeo discurre entre la vegetación del río, con suelo pedregoso y bajo la atenta mirada de un antiguo convento abandonado. Teníamos prevista la visita al antiguo monasterio de Suso, en San Millán, pero se habían agotado las plazas, por lo que proseguimos nuestro camino, ascendiendo por una vertiginosa pista hasta Pazuengos y a continuación Villanueva, o mejor dicho lo que queda de ella, punto en el cual debíamos interrumpir nuestro recorrido, ya que el permiso de medio ambiente no incluía esa pista hasta Ezcaray.

Así pues, en carretera llegábamos a Santurde, donde por pista llegamos a Ojacastro y Ezcaray.

El final de ruta fue una estupenda comida en el restaurante del Albergue la real fabrica.
Tras la comida la despedida, y vuelta a casa, de cada participante, esta vez difuminados ya que vinieron coches de León, Barcelona, Alicante, Valencia, Coruña y Madrid.

Esperamos poder repetir esta ruta, con nuevos trazados en próximas ediciones. Hasta la próxima.



TEXTO Y FOTOS: EDUARDO CELDRAN


TODAS LAS FOTOS EN: Galeria Iberutas 4x4


MAS FOTOS EN: Ruta 4x4

Eduardo Celdran Oteo (Ruta Pinares de Urbión 2008









RUTA PINARES DE URBION
ENERO 2008



El viernes por la noche la cita era en el hotel La reserva de San Leonardo Yagüe, y la cena en el restaurante El Hachero, donde siempre cenamos bien, pero siempre falta espacio. Tras la cena y con la llegada de los últimos participantes, se comenzó con el reparto de rutometros y con la carga de GPS para no perder tanto tiempo por la mañana. La operación y la tertulia se prolongo hasta altas horas de la madrugada.

El sábado por la mañana, una vez recuperados del sueño y tras el desayuno, Eduardo dio el breafing en la escalera del hotel, donde explico los pormenores de la ruta y los puntos de parada para las visitas, así como el punto de comida.
Nos pusimos en marcha, nada mas tomas el primer camino, nos dimos cuenta que el barro acompañaría todo la ruta. Entre pinos y por un camino estrecho junto a un arroyo circulábamos, despertando algún animal como un corzo que salió a nuestro encuentro.
El camino nos llevo hasta la carretera que nos levaba al mismísimo mirador del Cañón del río Lobos, pero la niebla nos impedía ver su grandeza desde lo alto, por lo que descendimos hasta el aparcamiento, donde iniciaríamos la primera “caminata” del día, hasta la ermita y la cueva del Cañón. Ya de vuelta a los coches, y ante la cantidad de niños asistentes a la ruta, decidimos realizar una parada en el centro de interpretación, donde existen cantidad de animales disecados y una explicación de la formación, vegetación, fauna del cañón.

Una parada sin un “piscolabis” no es parada, con lo cual algunos de los participantes aprovecharon la parada para “engañar” el estomago.

Ya en ruta una serie de pistas nos llevaron hasta el pueblo abandonado de cubilla, y a continuación entre pinares hasta Muriel de la fuente, pero una nueva pista, nos facilito aun más el camino, perdiendo un poco el sabor de los caminos antiguos...
En Muriel teníamos prevista la segunda parada y visita, esta vez a la laguna de la Fuentona, una extraña formación a un por explorar en su interior, debido al complicado sifón que forma en su interior.

La comida la celebramos en una zona recreativa, junto a la ermita de Muriel, el sol pro fin empezó a lucir, haciendo más agradable la parada. Verónica, reparito callos a diestro y siniestro, por supuesto estaban riquísimos, muchas gracias Vero. Enrique por su parte nos deleito con un café y un surtido de orujos, remato la comida...

De nuevo en ruta, la trialera del día nos esperaba, se trataba de una subida entre paredes de piedra, por un antiguo camino carretero. Todos la superaron sin problemas, excepto el debutante Adolfo, que prefirió no someter su Porsche Cayenne a las piedras, ya que su calzado no era apropiado para estas lides. Una vez superada la dificultada, nos encaminamos hacia Calatañazor, pueblos famoso por el dicho “donde Almanzor, perdió su tambor” y con un sabor muy agradable, y tiendas de venta de productos artesanales, que casi todos visitaron. Al no haber ningún bar abierto para tomar café, decidimos continuar por el nuevo tramo marcado, novedad este año, entre Calatañazor y Cabrejas del Pinar, atravesando un hermoso bosque de sabinas.

Un grupo, encabezado por Carlos y Enrique, equivocaron la pista, teniendo que tirar de su sapiencia con la navegación y el GPS, para recuperar la buena pista, eso sí, con una buena propina de kilómetros.
Una vez en Cabrejas y casi anocheciendo, nos internamos en los pinares de Navaleno, por las pistas semi-asfaltadas, que nos conducirían hasta la estación de Pinar Grande, lugar escenario de la película de Doctor Zivago, y que los participantes visitaron con gran interés.
Solo unos kilómetros de nocturna, nos separaban de Navaleno, lugar final de la primera etapa.

La cena esta vez en el hotel, por la cantidad de personas que éramos (41 adultos y 17 niños, en 22 coches) hacían imposible cenar fuera, en el pueblo...

La segunda jornada nos llevara en dirección norte, a través de las pistas, en buen estado, hasta el caserío de Amogable, base central de los forestales de la zona, con aeropuerto.
Seguimos camino hasta un peculiar refugio, que cualquiera de nosotros nos gustaría tener, en medio de este frondoso pinar, para poder pasar los fines de semana en la montaña. Nuestro camino sube hasta la ermita de Molinos de Duero y baja hasta llegar al pueblo, donde a través de la plaza accedemos a un vía crucis de piedra, que nos guía hasta la vecina Salduero.
Salduero nos recibió con un bonito vadeo del río Duero, que todos superaron sin dificultades.

Aquí comenzaba nuestra ascensión al pico Urbion, a través de pistas en buen estado, que alcanzan los 1700Mts con facilidad, hasta una tortea de vigilancia y el colindante caserío de Bocalprado. A partir de aquí la nieve hacia acto de presencia, pero todos los vehículos avanzaban con facilidad, pese a que el hielo iba aumentando en la rodera. Una vez en el cruce del Urbion, (ahora prohibido el acceso a los vehículos, suponemos por que es utilizada la pista para hacer ski de fondo, no queremos pensar en no poder volver a subir en coche) la pista se complicaba. El hielo se apodero del camino en las zonas sombrías y el Porsche Cayenne de Adolfo patinaba constantemente, pero no llegaba a pararse, hasta que junto a un puente, un pequeño repecho en curva, puso fin a las aspiraciones de este autentico todoterreno, pero con ruedas de autopista.
Comenzamos una maniobra para hacer avanzar al Porsche, que consistió en adelantarlo con el Jeep de Jesús, para remolcarle con una eslinga, pero no funciono, el Jeep patinaba y no era capaz de llevarse al Porsche. A continuación probamos con una cadenas prestadas, que José Manuel nos ofreció de su Parthfinder, pero al no ser la medida se soltaban al iniciar la marcha y empezar a patinar.
Finalmente, Jesús, dio media vuelta, para remolcar mediante wich al Cayenne, pero al estar en curva tuvimos que utilizar la polea de reenvío, y winchear en varias tandas, hasta que el Cayenne estuvo a arriba. Hora y media nos llevo esta operación, tiempo que aprovecho el primer grupo para visitar la laguna negra, y comprobar como las carreteras heladas, son peligrosas hasta para nuestros todoterrenos.
Una serie de turismos, se atravesaron en la carretera, teniendo que ser socorridos por el primer grupo. Mientras el segundo grupo salía de la pista nevada y comenzaba el descenso hasta Santa Inés, caserío, mediante el cual se accede a la carretera, que une Vinuesa con La Rioja.
Dos kilómetros de descenso y la tomábamos la pista que después de superar dos vadeos trialeros, nos dejaba en El Quintanarejo, lugar de la comida y final de la ruta. El restaurante Balcón de Brezal, nos recibió con unas migas, revuelto de boletus y gulas, y finalmente sus estupendos chuletones a la brasa, un fin de fiesta perfecto, para un fin de semana lleno de emociones.

El próximo año esperamos poder seguir contando con los permisos necesarios y que la nieve nos acompañe de nuevo. Hasta la próxima...

Texto y Fotos: Eduardo Celdran